La importancia de crear un Protocolo familiar para su empresa.

En estos últimos años he venido trabajando con varias familias empresarias de la región, ayudándoles a desarrollar lo que se denomina el “Protocolo Familiar”.

Cuando un negocio exitoso se inicia, por lo general su fundador tiene una visión muy clara hacia donde quiere ir (visión) y le es muy sencillo tomar decisiones, pues también tiene bastante claridad de cómo llegar ahí (misión).

A medida que éste crece, las decisiones comienzan a complicarse y por las múltiples oportunidades que se van presentando, la visión también se vuelve menos clara.

Es en ese momento cuando los hijos, ya crecidos y muchas veces convertidos en profesionales, inician su incorporación y a menudo traen sus propias visiones y formas de resolver los asunto. Lógicamente, esto produce diferencias de criterio no solo entre padres e hijos, sino también entre hermanos.

De ahí nace una tremenda disyuntiva presente en la mayoría de las empresas familiares:

¿Qué debe prevalecer, lo que creemos mejor para la empresa o lo que creemos mejor para la familia?

Un ejemplo claro de esto es la remuneración. Todo padre quiere dar un trato equitativo para sus hijos y por lo tanto, quiere pagarles a todos el mismo salario, para no hacer odiosas diferencias.
Sin embargo, ¿es lo mejor para la organización pagar todas las posiciones por igual?

Aquellos que se inclinan por resolver todos los asuntos favoreciendo el concepto de familia, terminan liquidando el negocio a la vuelta de pocos años. Por el contrario, los que resuelven todo a favor de la empresa, terminan con severos resentimientos familiares, que generan innecesarias separaciones y disgustos.

Como en muchas otras cosas en la vida, hay que encontrar el adecuado balance para procurar la felicidad de la familia y el éxito en los negocios.

Esto es lo que se busca a través del Protocolo Familiar.

Acerca del autor
Cristián Leñero Testart

Ingeniero Industrial y Máster en Administración de Negocios con énfasis en Marketing, con más de 20 años de experiencia como Director de proyectos de consultoría en empresas de toda la región Latinoamericana.

Del 2009 al 2017 fue Presidente del Consejo Directivo de INTECO, ente de normalización y certificación de productos y sistemas, representante de ISO en Costa Rica.